Camino del infierno
Por Fingolfin
Tercera parte, y para mi la mejor de toda la saga de “Lone Wolf and Cub”. Kenji Misumi continúa evitando caer en la rutina con nuevos personajes, nuevas situaciones, y muchas sorpresas dignas de mención. El trabajo de Itto Ogami en esta ocasión podría plantear problemas morales a cualquier otro, pero una vez mas demuestra su parsimonia y tranquilidad, haciendo exactamente lo que se espera de el.
Tatewaki Miura, primer consejero del Clan-Kakegawa, encarga a Ogami que elimine a Gemba Sawatari, un hombre que provocó la perdida de su clan y de 400 samuráis mediante su traición. Poco después, el mismo Gemba solicita sus servicios buscando la muerte de Lord Itakura, con lo que se encuentra con un importante dilema. ¿Debe matar a Gemba y cumplir con lo que se le ha ordenado? ¿O por el contrario debe matar a Itakura y servirse de ello como venganza al Shogun? Lo que puede parecer una difícil elección, no es más que un mero tramite para Ogami, como podremos ver.
Misumi cambia el esquema de juego en “Babycart to Hades”. Los Yagyu esta vez se mantienen al margen de la historia, haciendo acto de presencia solo al final, para recordar al espectador que siguen estando ahí, y que no se rendirán jamás. Entonces, ¿que ocupa los 40 minutos de entretenimiento que siempre ofrece el director antes de que Ogami reciba su misión? Pues bien, volvemos un poco a la tónica de “Sword of Vengeance”, y nos vemos envueltos en una breve historia de violaciones y prostitutas, que provocarán su enfrentamiento con los Bohachimon, un grupo de luchadores dirigidos por una mujer, que se ocupan de mantener el orden durante las noches.
En el terreno de la acción, disfrutamos de mejores coreografías que sus dos predecesoras, pero introducimos nuevos elementos interesantes. Las armas de fuego tienen una entrada muy activa durante la historia. Sus dos rivales en teoría más poderosos son expertos tiradores, por lo que Ogami debe servirse de Daigoro para tenderles emboscadas. Además de eso podremos ver una batalla final en la que un hombre, un niño, y un carricoche, se enfrentarán a arqueros, fusileros, hombres a caballo, y todo un ejército de rônin, que se interponen entre el lobo y su presa.
Excelente película en todos los sentidos, y que personalmente considero la mejor de las seis, discrepando de aquellos que le atribuían ese placer a la segunda entrega. Muy buena continuación, y muchas y acertadas innovaciones.
LW&C: Babycart to Hades (1972)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario